martes, 24 de diciembre de 2013

¡FELIZ DIVINIDAD!!!!


Escribo el título y le pregunto: “¿Por dónde quieres que comience a narrar nuestra historia de amor?  Una lágrima se desliza suave… me recuerda todas las otras que compartimos juntos… La paz de mi ser es nuestra unidad y la certeza de que me llevas de la mano me recuerda tu amor…
Divino Amor…

¿Por dónde empieza nuestra historia?  La respuesta es silencio porque no hay principio ni final; la eternidad no se mide así.  No empezamos nunca y jamás habrá final.  Sin embargo, quiero escribir de nuestros momentos.  Contémosle a todos de las veces en que te vuelves arcoíris para mí o me cantas una canción en mi balcón con la voz de una reinita...  Permíteme compartir las veces que me susurras ideas y consuelo al oído.  Dame la oportunidad de decirles que tú y yo co creamos universos, grandes y pequeños y que cuando tengo mucho miedo, siempre llegas y me abrazas y me recuerdas, con un “sana curita” de luz, que todo, todo, está perfectamente bien. 
Quiero contarles de cuando te luces y me regalas espectaculares sincronías, visiones y milagros; de cuando respondes mis oraciones al momento y me “dices” con una risita medio burlona:  “Estás en el Vortex…”.  Déjame comentar de las veces que me hablas con la voz de los que me aman;  de cómo me abrazas con los brazos de gente extraña a la que ayudo a sanar y de cómo luego me ponen tu amor en las manos como los reyes pusieron oro, mirra e incienso en los pies del niño…
Permíteme el privilegio de confesar que eres la musa de mis más bellos poemas y el color azul de los ojos de mi amado que se confunden con ese océano en el que tú y yo por siempre hemos sido UNO.  Quiero que todos sepan que te amo tanto que no temo jamás decir que yo soy tú y tú eres yo, aún cuando los que temen me apedreen con sus miradas.  Ya muchas veces he muerto por ti y sé que felizmente moriré mil veces más hasta que al fin, entienda por completo eso que se llama AMOR y entonces nuestra eternidad tendrá un solo nombre:  DIANIDIOS.
Gracias por nuestro romance eterno…  Dame el privilegio de seguir siendo tú para quien lo necesite, agradezco me lo permitas.  Déjame contarles, por favor, para que la nuestra sea la más bella historia de amor:  mía y de todos, y que el AMOR se convierta en nuestra única y más feliz verdad…  ¡FELIZ, FELIZ, FELIZ DIVINIDAD!!!!!